La vieja guardia cuenta que siempre existieron aquellos bares y esos boliches
donde funciona el “¿que mirás?” y cualquier roce o cruce de miradas o cuestión futbolera, racial, política o regional lleva a la pelea física entre los implicados.
También agregan que justo ahí entra a regir el “código”, eso de “vamos afuera, hacemos mano a mano” y cuando uno cae al suelo todo termina, todo resuelto.
Si a cualquier persona que esté leyendo ésto le interesa, por favor, vuelva a leer el primer párrafo.
Sí, estamos de acuerdo casi seguro, todo es una gran pavada.
Ahora parece ser, la cosa es 10 contra 1. Diez contra Uno.
Hubo algún roce y una mala mirada. Pelea. Un boliche, adolecentes de vacaciones. Patovicas que los sacan a la calle. Todos conocemos los detalles.
Uno elije tomar un helado, tal vez así dejar atrás la secuencia de una mala noche.
Diez elijen cobrar no sé qué, vengar no sé cuanto, saldar que sé yo.
Y no es “mano a mano”, no rige el “código”, que de por sí es una gran estupidez.
Es diez contra uno, y a matar. Y lo mataron. Y ninguno fué capaz de frenar la cosa, de pegar un grito al otro y dar por terminada la paliza, por aquella pavada, por alguna estupidez. Ni la gente que pasaba por ahí, ni los del boliche de enfrente, ni la policía. Todos en alguna pavada, en otra estupidez.
Patadas en la cabeza del caído, golpes al indefenso. Diez pares de brazos y piernas castigando al cuerpo de uno, en el suelo. Estoy seguro que esas no deben ser las reglas del Rugby.
Es imposible saber y así juzgar la educación impartida en cada casa, de cada una de las 10 familias. Mal y pronto puedo decir, de bronca e impotencia, que habrán mamado lavandina y no leche materna. No sé si los criaron así o asá, si aprendieron mal, si es por la música o los jueguitos virtuales que consumen.
Todos queremos que la ley actúe, 40 años o perpetua, lo que sea. Premeditación y alevosía. Así dicen, así es.
Fernando Baez Sosa ya no está para su madre, su padre, su familia. Ni para su novia. Ni para sus amigues.
Lo mataron. Por nada, por viejos códigos multiplicados por diez.
No soy quién pueda analizar la psicología del asunto, ni la cuestión social, ni dar opinión periodística. Me guardo y muerdo las palabras del verdulero desocupado que soy.
Y el poeta que pretendo ser, tan sólo puede llorar en letras que el mundo se puso un poco más feo, muy pero muy triste y diez contra uno.
Luis Alberto Erker Ercolano, poeta. Autor de
poemas, relatos cortos, letras de música y actos teatrales. Libros
publicados: Masturbando a la Elefanta (2013); Flores del Asfalto (2016).
Co-condujo Maldita Ginebra (2010 a 2017). Actualmente conduce los
ciclos de poesía Como los Bueyes (itinerante) y Materia Oscura (primeros
y terceros viernes de cada mes en el pool de Lily, Anchorena y
Corrientes). Y el programa radial Materia Oscura, La Previa (viernes de
21 a 23 hs): www.lavecindaradio.com
Contacto: elerker1975@gmail.com / Luis Alberto Erker Ercolano facebook
Acaba de salir Verborragia -ediciones Ombligo Cuadrado-, su nuevo libro de poemas.