A mi viejo.
Buenos Aires, Julio de 2017
Hace un tiempo asisto
Al des seso de mi padre
Incapaz de hacer sus cuentas
De sostener su prestancia
De encontrar la palabra
De maniobrar su cuerpo
De atender al otro
De valerse por sí
De no sentir
impotencia, vergüenza
De registrar lo que pasa
Va
-y se queda-
Cada vez más ido
A quizás un (no) lugar
-detrás del tiempo y el hambre-
Otro
Incomunicable
Así
¡Joder!
Como el golpe de un cross
Ante el cual (ya) no hay guardia
La parca su vida
Se lleva
Apagando luces y ganas
Miguel Ángel Rodríguez, escritor.
licmar2000@yahoo.com.ar